Mi cigarro
se consumía en el cenicero y mi alma no quería rescatar recuerdos ya olvidados
en mi consciente, el dolor siempre desaparece para dar la bienvenida al olvido,
no recordar, es no hacerte daño a uno mismo. En esa desesperación del recuerdo,
es donde el olvido se debilita, dejándonos paso al recuerdo duro y sin adornos,
vengándose por intentar recordar cosas ya olvidadas, pero muchas veces no
perdonadas a nosotros mismos.
7-04-2012
Ya no podía
soportar la soledad del ser, y mi amigo imaginario y yo nos fuimos en busca de
la verdadera compañía del ser. Al salir comprendimos que la soledad es
simplemente un momento, que es un estado en el cual simplemente presenta un
sentimiento oculto, que no quieres que sea revelado en compañía. La búsqueda
del otro es simplemente el terror de no poderte quedar en compañía de uno
mismo, esas culpabilidades, deseos, arrepentimientos, esos miedos, que te
invaden en la soledad de la noche nocturna, y que se disipan al alba, que
siempre trae luz y calidez a la mañana, al fín es de día, y ya calma mi deseo
de soledad. El no estar sólo en la noche y a la luz del día mi sombra y yo
vamos a caminar.
7-04-2012
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