Corsario que atraviesas mares
eternos,
Con tu espada siempre a cuestas,
Cada puerto una nueva aventura,
Cada mar un nuevo botín,
Y en tierra la soledad te aborda.
Tu mente navega los mares,
Tu sangre por tus venas,
Y tu alma en busca del sentido.
Caballero andante de mil aventuras,
Cabalgas sin descanso entre caminos,
Tu armadura siempre resplandece
Al sol de la mañana y al atardecer,
Ya solo es polvo del camino.
Cabalga, cabalga hacia la nada,
Sin sentido del camino,
Cabalga sin descanso a día y a la
noche,
Rutina de aventuras, de amores y
noches,
¿Qué buscas en tu andadura?
Vendrán mil y un adversarios,
Vendrá hasta la muerte y el
nacimiento,
Vendrás a mí en busca de consuelo,
Vendrá la verdad en su total locura.
Pero al final sólo quedarán
Mil y una palabras escritas
En un papel que se apolilla
En tu biblioteca oscura de la
cocina.
Donde enriqueces mente y alma,
Con una pizca de alegría,
Dos tazones de amargura,
Una de locura y remueve,
No pares de remover,
Hasta que aparezca la
Esperanza de vivir una aventura.
24-10-2013